Arrancamos el año con cierta tranquilidad aunque no exenta de ingresos tanto de animales vivos como de ejemplares fallecidos, que son admitidos a través de cadenas de custodia por parte de agentes de la autoridad ( intoxicaciones o sospecha de veneno, electrocuciones, colisiones en tendidos, atropellos o disparos).
Entre las causas de ingreso de Enero podemos señalar el caso de un Cormorán disparado con las dos alas rotas que fue operado pero falleció al finalizar la cirugía.
Paralelo a esto apuntar las admisiones de los primeros pollos de cárabo común (Strix aluco) que han ingresado en el centro, 6 en total, que se encuentran en la instalación junto con un tutor de su especie donde permanecerán hasta que sean grandes e independientes para ser liberados.
Además, durante este mes hemos realizado los chequeos de los 17 buitres negros (Aegypius monachus) que inician su cuarentena y serán enviados a Bulgaria en los próximos meses dentro del proyecto Vultures back to LIFE en el que AMUS colabora junto a la Vulture Conservation Foundation. En estas revisiones sanitarias se toman muestras de todos los ejemplares para la determinación de los valores de ciertos tóxicos o metales pesados y sexaje a la vez que se comprueba su estado de salud y correcta identificación mediante microchip.
Uno de los ingresos más curiosos de este mes ha sido esta hembra de tritón jaspeado (Triturus marmoratus) que fue encontrada sin ninguna lesión. En estos casos, es importante no intervenir si el animal no lo necesita, ya que este ejemplar fue hallado en su hábitat natural y no requería de ninguna atención o cuidado. Por suerte, fue liberada poco después de su ingreso para que pueda disfrutar de los días húmedos de lluvia.
